Una empresa humanizada es aquella que ofrece a sus colaboradores la oportunidad para su desarrollo personal y profesional. Es decir, las prepara tanto para “saber ser”, como para el “saber hacer”, único método para llegar a un proyecto común del cual todos salen beneficiados.

Toma acciones concretas de prevención de su salud física, mental y social.

Promueve la capacitación permanente de su personal a nivel técnico y humano.

Una empresa u organización es una institución social y una comunidad de personas, las cuales no pueden ser consideradas como un recurso cualquiera.  El trabajador pasa en la empresa gran parte de su vida y el trabajo es para muchos el centro de su experiencia vital.

Por eso es importante crear un ambiente en el que pueda experimentar sentimientos positivos en relación con su labor, consigo mismo, con los demás y su organización, todo lo cual tendrá importantes repercusiones personales, empresariales y sociales.

Si se requiere reorganizar una empresa, reestructurar procesos, promover cambios, elevar el nivel de satisfacción al cliente, aumentar la rentabilidad, evitar accidentes, etc., es importante comprender el mundo emocional, las percepciones, actitudes, conductas de las personas, ya que la satisfacción del trabajador es compatible con su rendimiento y la productividad con la humanización.

El éxito empresarial depende de la forma como se trata los recursos humanos. Las personas no son ni pueden ser sujetos pasivos del cambio, son el  propio instrumento de cambio y según sus actividades, comportamientos, creencias y emociones, serán capaces de orientar más o menos  la empresa hacia sus metas.

• Promover el desarrollo del “auto apoyo”, proceso a través del cual las personas y organizaciones encuentran sus propios recursos y soluciones, a partir de sus darse cuenta, del responsabilizarse y el despliegue de sus potencialidades.
• Brindar apoyo en la implementación del sistema de gestión de SSO, interviniendo en la prevención de riesgos psicosociales, ergonómicos y la difusión de la normativa vigente. 

• Se desarrolla en forma de talleres que fomentan el experimentar y el darse cuenta de manera vivencial, con un respeto absoluto a la persona, a lo que haga o no haga, a como sea su modelo de conducta, independientemente de condicionamientos, prejuicios y creencias del facilitador.  El principio básico de nuestro trabajo es HUMANISTA y la visión HOLISTICA, donde el propósito es integrar, más no analizar la experiencia ni interpretarla.
• La Psicología Humanista propone además que el ser humano es dueño de su destino, y nadie sabe más de sí mismo que la propia persona. El facilitador es un acompañante en este proceso de crecimiento que favorecerá el auto apoyo y el contacto con su entorno. (medio laboral, familiar, social).
• Los talleres se realizan además utilizando los principios de los grupos de encuentro de William Schutz: Apertura, honestidad, el darse cuenta de sí mismo, la responsabilidad  y enfoque en el presente.